FACHADAS VENTILADAS
Las fachadas ventiladas son sistemas de recubrimiento exterior formados por capas separadas con una cámara de aire intermedia. Estos sistemas facilitan la circulación del aire, lo que ayuda a la eficiencia energética de los edificios al regular la temperatura interna.
La relevancia de las fachadas ventiladas reside en su capacidad para mejorar la calidad del aire interior, disminuir la carga térmica, reducir los problemas de condensación y mejorar el aislamiento acústico. Además, proporcionan mayor durabilidad al resguardar la estructura del edificio de las inclemencias del tiempo y permiten una amplia gama de diseños estéticos.
VENTAJAS
Eficiencia Energética
Las fachadas ventiladas destacan por su capacidad para optimizar la eficiencia energética de los edificios. El espacio de aire en la fachada funciona como un aislante térmico extra, disminuyendo la transferencia de calor entre el interior y el exterior.
Esto contribuye a regular la temperatura interna de manera más eficiente, reduciendo la necesidad de calefacción y refrigeración. Como consecuencia, se disminuye el consumo de energía y los costos operativos a largo plazo.
Asimismo, al necesitar menos energía para mantener una temperatura confortable, las fachadas ventiladas también favorecen la sostenibilidad y benefician al medio ambiente.
Mejora de la calidad del aire
La circulación del aire en la cámara de ventilación de las fachadas ventiladas desempeña un papel fundamental en la mejora de la calidad del aire interior.
Mediante la entrada de aire fresco y la extracción de aire contaminado, se consigue un equilibrio adecuado de la humedad y la eliminación de contaminantes, tales como olores, polvo y alérgenos.
Esto es particularmente beneficioso en edificios donde la ventilación natural es limitada. Al tener una mejor calidad del aire, se fomenta un ambiente interior más saludable, lo que puede impactar positivamente en la salud y el bienestar de los ocupantes, así como en la productividad y el rendimiento.
Control de la Condensación
La incorporación de una cámara de aire en las fachadas ventiladas contribuye a gestionar la condensación y sus efectos perjudiciales. La condensación se produce cuando el vapor de agua se convierte en líquido al entrar en contacto con superficies frías, lo que puede llevar a la aparición de moho, el deterioro de los materiales y una disminución en la eficiencia energética.
Permitir la circulación del aire en la cámara de ventilación impide que se acumule humedad en la estructura del edificio. El aire exterior más frío ayuda a mantener las superficies interiores a temperaturas más altas, disminuyendo así la posibilidad de condensación. Esta capacidad de gestionar la condensación ayuda a preservar la integridad de la estructura y a mantener un ambiente interior saludable.
Aislamiento Térmico y Acústico
La combinación de las capas de recubrimiento y la cámara de aire funciona como una barrera extra contra el ruido exterior. Las capas externas absorben y reflejan las ondas sonoras, mientras que la cámara de aire ayuda a disminuir la transmisión del ruido hacia el interior del edificio.
Esto resulta especialmente beneficioso en áreas urbanas, cerca de carreteras con mucho tráfico o en edificios situados en entornos ruidosos. Al reducir la exposición al ruido no deseado, las fachadas ventiladas contribuyen a crear un ambiente interior más tranquilo y confortable.
Protección Estructural
Al funcionar como una barrera frente a los elementos climáticos, tales como la lluvia, el viento y la radiación solar, las fachadas ventiladas protegen los materiales de construcción que están debajo. Esto contribuye a evitar el deterioro temprano y la degradación de la estructura, lo que a su vez disminuye los costos de mantenimiento y extiende la vida útil del edificio.
Adicionalmente, las fachadas ventiladas pueden servir como una protección contra incendios, dado que ciertos materiales empleados en su construcción pueden tener propiedades retardantes de fuego, incrementando la seguridad del edificio y de sus ocupantes.
Versatilidad Estética
Las fachadas ventiladas brindan una variedad extensa de alternativas estéticas y de diseño. Los variados materiales empleados, como piedra, cerámica, vidrio o metal, pueden mezclarse de múltiples maneras para obtener el efecto visual deseado.
Esto facilita a los arquitectos y diseñadores la creación de fachadas personalizadas y atractivas que se ajusten al estilo y la identidad del edificio.
